Paulo Cassinerio: «Llaryora es el candidato necesario y oportuno»

Mientras el Intendente Mestre se guarda la carta de la convocatoria para las elecciones en Córdoba Capital, el peronismo dirime su disyuntiva interna ante un momento crucial que lo pone ante la chance concreta de recuperar la ciudad que le ha sido históricamente adversa. Uno de los hombres que se aboca de lleno a trabajar en el armado capitalino es el actual diputado nacional Paulo Cassinerio. Con él hablamos en exclusiva para Mano a Mano. 

-¿Cómo está el peronismo de cara a la elección en la ciudad?
-El peronismo está trabajando muy fuertemente de cara a la próxima elección para la intendencia de la capital, algo que se demuestra con la cantidad de compañeros que manifestaron su voluntad de ser candidatos y que están recorriendo la ciudad de punta a punta exponiendo sus propuestas. Todo ese movimiento da cuenta de la voluntad expresada por el peronismo para recuperar la ciudad de Córdoba y soñar con tener un gobierno municipal del mismo color político que el provincial. Ese es el gran anhelo.

-Hay muchos análisis que señalan que este es el mejor momento para el peronismo en la ciudad después de muchos años. ¿Por qué crees que es así?
-Me parece que hay una voluntad real para hacerlo expresada por el propio gobernador. También tenemos muchos candidatos pero desde lo personal creo que Martín Llaryora es el candidato necesario y oportuno. Es el compañero que nos puede llevar al triunfo por dos cuestiones muy puntuales. En primer lugar porque lo conozco, trabajo con él permanentemente y sé de su capacidad y su historia como militante, tanto territorial como institucionalmente. En todos los lugares en los que ha estado ha dejado una huella; desde el 2001-2002 cuando se lanzó el Programa Primer Paso y él era director de empleo, desde la transformación que llevó adelante durante sus gestiones en la ciudad de San Francisco, desde su función como Ministro de Industria y también desde su lugar como vicegobernador de Juan Schiaretti en donde también cumplió una función magnifica. Me parece que todas estas cosas están en la consideración del cordobés porque tanto las encuestas propias del PJ como en la de los otros partidos marcan que Martín está muy bien posicionado para poder ser intendente de esta ciudad, entonces mi criterio indica que estamos ante un candidato muy fuerte para soñar con la posibilidad de que el intendente y el gobernador sean del mismo espacio político y que puedan trabajar en conjunto. Yo como diputado nacional tengo la posibilidad de caminar mucho por diferentes ciudades de la provincia y veo lugares que han crecido, que son pujantes y hermosos como Alta Gracia, Villa María, Río Cuarto, Cruz del Eje o San Francisco pero cuando entro a la Ciudad de Córdoba la veo lastimada, la veo oscura y la veo sucia. Luego de siete años de la gestión de Ramón Mestre estamos discutiendo si va a pasar el basurero o no. Córdoba debería estar dando otras discusiones, somos una de las ciudades con las primeras universidades de América, no puede ser que la Córdoba de la industria y de la educación esté discutiendo si van a levantar la basura. Las cuestiones más básicas que deben ser resueltas por una gestión representan un problema hoy para la ciudad. Yo considero que si el gobernador ha invertido más de $25 mil millones los gasoductos que no se pueden hacer con fondos municipales, ha invertido una inmensa cantidad de dinero y esfuerzo en el cierre de la circunvalación y ha invertido una gran cantidad de fondos en política sociales destinados a los cordobeses teniendo un Intendente de distinto color político, me imagino lo que podrá hacer trabajando con uno de su mismo espacio político con quien ya ha demostrado tener una gran capacidad de gestión conjunta.

-Habló de la cantidad de pre-candidatos que confluyen en el espacio. ¿Cómo cree que debería dirimirse la discusión hacia adentro de Unión por Córdoba?
-Lo primero que yo quisiera hacer es destacar mi gran afecto y respeto por cada uno de los aspirantes a la intendencia, creo que cualquiera de ellos sería un excelente candidato. Si evaluamos el trabajo del Dani Passerini en Desarrollo Social y en la legislatura; si evaluamos la gestión del Gabi Bermúdez en Transporte o vemos lo que significa en el recambio generacional un hombre como Miguel Siciliano, no quedan dudas que todos están fuertemente capacitados para ser los candidatos del espacio. No obstante a eso yo creo que nosotros tenemos una unidad de concepción en el peronismo de Córdoba y a partir de eso, llegado el momento de definir quién va ser finalmente quien nos represente en la boleta para la intendencia, me parece que por una cuestión de posibilidades concretas que se manifiestan en las encuestas las candidaturas se van a terminar acomodando. Acá, si hay algo que todos queremos eso es ganar la ciudad y entendemos que la forma más probable de ganarla es apostando a ese candidato que mida más.

-¿Cree que Mestre puede especular con la fecha de las elecciones o eso es algo que los tiene sin cuidado?
-Yo no tengo duda que deben estar dilatando la convocatoria por una especulación política. Hace poco tiempo escuchábamos al Intendente y a algunos de sus funcionarios solicitar enfáticamente al gobernador que dijera cuál era la fecha de la elección provincial y cuando lo hizo lo salieron a criticar. Ahora nosotros estamos esperando que lo digan ellos y no tengo duda de que están especulando. Para mí lo ideal, en función de pensar en un ciudadano que el año que viene va a tener cinco elecciones -Intendente, Gobernador, PASO, primera y segunda vuelta nacional -, es que deben realizarse el 12 de mayo para evitar el costo y el desgaste de la ciudadanía en materia de elecciones.

-No le iba a preguntar por el plano nacional pero me tiró que va a haber segunda vuelta.
-Hoy los números lo marcan claramente. Estamos muy lejos de aquel Macri victorioso de las elecciones de medio término. Ha sido un año oscuro para el gobierno nacional, con una inflación del 48%, con una pobreza que se ha elevado al 33% – cinco puntos más que el año pasado – y con una devaluación de casi el 100%. Realmente me parece que el mejor equipo de los últimos 50 años ha sido el mejor equipo para un número muy reducido de la población en detrimento de la gran mayoría restante. Recordemos además que “el Messi de la economía” duró tres meses, por ejemplo. Por todo esto me parece que hoy la imagen del Presidente Macri ha caído muchísimo y ante esa realidad está claro, al menos, que no gana en primera vuelta.