Política
Oscar Tamis: «Son los Intendentes los que ponen la cara ante los vecinos»
A simple vista, Oscar Tamis, está tranquilo y distendido. Aunque si uno indaga en su actividad permanente siempre está haciendo algo que, por lo general, se relaciona con asuntos de su gestión al frente de la Ciudad de Oliva. Si bien su accionar político nunca estuvo tan circunscrito a ese (su) lugar en el mundo, hay un nuevo desafío que le presentará obligaciones oficialmente más amplias. Acaba de ser elegido como Presidente de la Comunidad de Municipios de la Provincia de Córdoba, que nuclea a los jefes comunales que políticamente comparten colores políticos con la administración nacional. El nuevo referente fundamental del mapa político del interior cordobés pide dejar los formalismos de lado. «Tratame de vos, por favor» pide antes de enceder el grabador.
-Esta bien. ¿Cómo te agarra este nuevo desafío?
-Yo conozco el espacio de intendentes del COMUPRO desde hace mucho tiempo. Desde el 2007 soy Intendente de Oliva y me ha tocado compartir momentos con mis pares que son permanentes porque siempre he estado convencido de participar y lo he hecho en diferentes instancias de las estructuras de las que voy formando parte. En esta nueva etapa, y luego de la reconversión y mi paso político del Frente Cívico al PRO, aparece la responsabilidad de presidir este espacio y es algo que, sinceramente, me llena de orgullo.
-Me gustaría ahondar sobre tu trayectoria política. Llegas a la intendencia de Oliva encabezando la boleta del Frente Cívico que, precisamente, nace como un frente. ¿Hubo algo antes?
-Yo tengo 52 años. Nací a la vida política con el regreso de la democracia embanderado tras la figura de Raúl Alfonsín. La Unión Cívica Radical es la fuente de mi formación política. Habré empezado a participar en el 82 o el 83 y ahí estuve hasta el año 2006. Hubo una situación muy particular ese año porque entendí que estaba teniendo una desventaja en mis posibilidades de presentarme como candidato a Intendente de mi ciudad. Yo había tenido una participación muy activa en todos los espacios internos del partido, principalmente de la juventud, y en ese momento era concejal en representación de mi partido. Eso fue lo que me permitió ser candidato por el Frente Cívico en el 2007, en una alianza que integramos entre muchos otros radicales que habían participado conmigo en distintas etapas del partido y de la ciudad y fue ese armado el que me permitió acceder a la Intendencia y comenzar este camino que todavía se desarrolla. Es decir, mi origen es radical pero el Frente Cívico me permitió ser candidato en un espacio que tiene las características que todos conocen en donde confluyeron radicales, peronistas, independientes y (en el caso puntual de Oliva) referentes del empresariado y la industria.
-¿Cómo fueron estos diez años al frente de la Intendencia de Oliva?
-La experiencia es realmente motivadora. Yo tengo las mismas expectativas, ganas y entusiasmo que tenía al comienzo. Y te digo esto consiente de que estamos llegando al final del ciclo. Yo no me creo irremplazable y sé que no soy la única opción. Vamos a llegar a los 12 años de mandato y yo estoy convencido de que tiene que haber alternativas porque creo en la necesidad de la alternancia. De hecho, hubo circunstancias particulares que rodearon la posibilidad de este tercer mandato. Si bien habría que preguntarle a los vecinos de Oliva para tener un balance más claro, personalmente creo que hemos hecho una buena gestión. Por eso nos han elegido tres veces.
-¿Cómo ha sido la relación con el gobierno provincial en estos diez años?
-Ha sido variable pero hemos podido trazar los puentes que hacían falta. Con la anterior estructura de intendentes de la que formé parte, que nucleaba a los del Frente Cívico y que encabezaba Marcelino Gatica, inauguramos un espacio de diálogo que fue muy adulto. Aquello se llamaba FEMUCOR (Federación de Municipios de Córdoba) y allí estaban también referentes de ciudades muy importantes como Daniel Giacomino por Córdoba y Antonio Rins y posteriormente Juan Jure por Río Cuarto. Con tirones y con momentos que fueron un poco más complicados que otros, aquello fue el inicio de una relación siempre adulta. De todos modos, si bien el municipalismo en Córdoba está mucho más desarrollado que en otras provincias de la Argentina, me parece que hay que insistir en que la relación política del gobierno provincial con los gobiernos locales debería estar más fluída y aceitada. Esa discusión de fondo siempre está presente.
-¿Y hoy cómo es? Han cambiado las condiciones políticas nacionales, han cambiado los colores políticos a nivel país y también la forma de relación entre la provincia y la nación.
-El nuevo rol y la irrupción de la presidencia de Mauricio Macri han cambiado las reglas de la relación con la provincia. Y lo digo de esta manera porque el espacio anterior que yo integraba tenía características mucho más contestaría. El Frente Cívico era un espacio que mantenía siempre la guardia arriba. No es que eso haya mutado pero la relación que existe entre la provincia y la nación hace que las condiciones generales sean diferentes. La coyuntura actual da cuenta de un dialogo maduro y responsable. La mes provincia-municipios es un canal importante que hoy se encuentra con algunos problemas en torno a algunas discusiones más complejas como lo son los fondos coparticipables. Nosotros como intendentes estamos reclamando algo a lo que la provincia nos responde que no se puede empezar a discutir un reparto de fondos que se calculan desde un acuerdo firmado entre el gobierno nacional y provincial porque eso no está materializado en leyes. Entonces, en ese punto, es en donde las nuevas condiciones políticas nacionales hacen que nosotros mantengamos la guardia alta pero con la expectativa de una solución cercana. En paralelo a eso, hay otras discusiones históricas como lo son las que giran en torno a los fondos específicos en los impuestos inmobiliario y rural y en los ingresos brutos. Nosotros sentimos una discriminación con respecto a la no coparticipación de esos fondos que representan una cantidad de dinero realmente importante. O sea, siguiendo con la metáfora boxística, estamos en un momento en el que nos estamos midiendo para ver cómo sigue la cosa.
-¿En algún momento pensás que la discriminación que sienten los intendentes tiene que ver con el color político o es algo que tiene que ver con una forma en que se maneja la provincia con respecto al interior en general?
-Hay reglas de juego no escritas que uno no solamente entiende sino que en cierta forma acepta. Hay normas no escritas que son permanentes. Una de ellas es que el gobierno provincial privilegia a los que son de su propio palo. Yo quiero remarcarlo ni entrecomillarlo pero sí quiero dejar en claro que esto ha sido así. Los intendentes alineados en Unión por Córdoba reciben un trato preferencial con respecto a algunos fondos que no fluyen con la misma velocidad hacia los gobiernos de fuerzas políticas opositoras. Ese formato o esa forma de manejar las cosas es aceptable en la medida en que no se exacerbe. Esa realidad es la que nos obliga a ir midiendo todo el tiempo. A mí me parece que en el reparto de fondos coparticipables los problemas no responden a un problema financiero de las arcas provinciales sino a un criterio de centralidad política que hemos visto y seguimos viendo a medida que cambian los gobiernos y las prácticas se repiten.
-Y la plata se concentra en los gobiernos más grandes
-Si, en los presupuestos nacionales y en los provinciales. A mi e parece un error porque yo siempre digo que los gobierno municipales son los que tendrían que estar mejor financiados porque son los que ponen la cara frente a la gente a la hora de resolver los problemas. Ni el Presidente ni el Gobernador están en el día a día del vecino de la forma en que lo está el Intendente. Por eso digo que los 2200 responsables municipales del país o los 427 cordobeses son los que ponen la cara ante todos estos temas.
-Una última. ¿Cómo está la zona?
-Córdoba es una provincia muy amplia y muy diversa. Más allá de cómo está la región en la que se ubica puntualmente la localidad de Oliva, hay que tener en cuenta la totalidad de la provincia que es muy cambiante a lo largo de todo su territorio. El norte y el oeste tienen una realidad muy distinta a la que tienen el centro, sur y este de la provincia respecto a su potencialidad y desarrollo. En lo que atañe a nosotros, que estamos en el centro productivo del país, podemos decir que nuestra zona tiene resueltas algunas cuestiones básicas como la calidad de vida en términos generales. Más allá de los problemas, de las sucesivas crisis que hemos tenido que enfrentar y del momento particular en el que estamos hoy. Todos los días tenemos índices que no son para nada favorables pero estos índices no impactan en nuestra zona como pueden impactar en otros lugares. Pero yo no puedo abstraerme de lo que pasa en otras regiones de la provincia. Creo que nosotros tenemos una deuda de honor con el norte y con el oeste cordobés que no podemos no mirar.
0 comments